Cuando un extraño te sigue... (Creepypasta de redes sociales)

 Una de las frases más usadas por los padres es: "no hables con extraños." Es curioso como esta frase a medida que pasara el tiempo fue perdiendo la fuerza que tenía antes cuando muchos de nosotros éramos niños.

"No hables con extraños", "si alguien te ofrece un dulce nunca lo aceptes", entre otras frases que nos decían en la infancia y mirennos ahora, le contamos más a personas que usan cuentas de parodias más de lo que le contamos  a nuestras amistades y familia...

Esta es la historia de Cindy de 22 años oriunda de la ciudad de Progreso departamento de Yoro, Cindy siempre fue una niña muy inteligente y muy sobresaliente en sus actividades escolares, era conocida por su fluidez al hablar en público y por sus ganas de siempre estar a la luz, pero hay un problema, cuando pasas mucho tiempo en la Luz te expones a ser observada por aquellos que pasan en las sombras y que adoptaron la oscuridad como tal y Cindy lo aprendería de la peor manera.

Sucedió un día de agosto luego de salir de la universidad del valle de sula, Cindy salía de un laboratorio de una de sus clases, para nadie era misterio que ella estudiaba biología pues sus redes sociales pasaban llenas de contenido que ella subía de sus clases y laboratorios; eran aproximadamente las 9:00 p.m. cuando a su teléfono le llegó un mensaje, era sumpadre diciendo que no podría ir a traerla porque tenía problemas con el carro y que pidiera un taxi o que una amistad la llevará y que el respondería con el gasto de la gasolina. La cuestión es que Cindy ya se había despedido de sus amigos y a esa hora no había muchos taxis, de alguna forma se le ocurrió recurrir a sus redes sociales pidiendo de favor un transporte, no esperaba que alguien respondiera pero lo hizo porque no tenía nada que perder... Para su sorpresa alguien respondio diciendo que estaba cerca de donde ella.

Al cabo de unos minutos la persona llegó justo a la entrada de la universidad, Cindy se sorprendió al ver qué era un muchacho de algunos 25 años con buena presentación, un auto modesto pero decente, rápidamente le ganó la confianza para decirle que necesitaba llegar a casa... "Nunca te subas al auto de desconocidos".

Luego de unos 20 minutos con las calles despejadas Cindy llego a su casa, agradeció a la persona no sin antes preguntarle su nombre y luego de que esté le pidiera una salida más formal,. Cindy acepto después de todo estaba agradecida con el favor que le hizo.

Al cabo de unos días el joven llamado Alexander le escribió a Cindy a su número para preguntarle si pasaba por ella el día viernes que habría una actividad dedicada al café del cual Cindy era fanática, ella por supuesto acepto, pidió que pasara por ella a las 6:00 P.M. 

Eran exactamente las 5:50 PM cuando Alexander llego y llamo a la puerta, Cindy salió de manera casual y para su sorpresa el andaba bien vestido casi demasiado para la ocasión, su segunda sorpresa fue que aquel modesto auto que ella esperaba ver no estaba,  al contrario había un auto prácticamente salido de fábrica, a muchos les hubiera parecido extraño pero ella simplemente pensó que solo era una casualidad y ya...

Fueron al lugar donde de suponía era la famosa feria, degustaron un par de tazas y se dispusieron a platicar más de ellos, Cindy hablabaas de si misma que lo que Alexander hablaba de él, hablo de su vida, sus gustos, pasatiempos y sus ambiciones personales, casi no le interesaba hablar de Alexander o de otra cosa que no fuera ella y sus metas en la vida. La cita se había tornado un poco tediosa por lo cual decidieron irse del lugar. Al subirse al auto Cindy noto a Alexander cada vez más nervioso, le pregunto si estaba bien y este respondía de forma vaga o se quedaba callado, esa conducta de él ya le estaba alertando de que algo no andaba bien, pero fue muy tarde cuando quiso gritar ya estaba respirando cloroformo.

Se encontraba aturdida, no reconocía el lugar donde estaba, solo veía paredes blancas y una tenue luz amarilla, de repente escucho una voz: "buenos días o buenas tardes Cindy, la verdad no importa..."- reconoció en ese instante la voz de Alexander, quería gritar pero se encontraba amordazada y sujeta a una silla de pies y manos, Alexander se le acercó y le quitó la mordaza de su boca. -"porqué? Porque haces ésto Alexander que te hice yo?"-. Dijo mientras derramaba lágrimas de desesperación.- "porqué? En serio quieres saber porque?-. Respondió Alexander.-"básicamente Cindy te he seguido desde hace mucho tiempo, mucho antes de que pudieras el favor en auto, te miraba hablar de lo maravillosa que es tu vida y nunca te has preocupado por nadie más por vos, todo es Cindy, miren a Cindy, Cindy quiere brillar siempre! Pues mira estás siendo vista ahorita mismo, tienes toda mí atención la disfrutas !?". Dijo Alexander mientras empezaba a rasgar su ropa descubriendo poco a poco sus senos de tal manera que podía tocarlos de forma libre, Cindy intentaba gritar pero era inútil nadie la oía, Alexander entonces procedió a abusar repetidamente de ella hasta que se quedó sin fuerzas, al cabo de unas horas se vistió mientras la miraba le dijo: "sabes no hice esto solo..." Abrió una puerta y de ella salió Raquel, la mejor amiga de Cindy, grabando todo lo que estaba sucediendo, Cindy llorando pregunto porqué ella, su mejor amiga y su confidente, Raquel la vio y le dijo: "me cansé de ti, siempre quería brillar y para vos no existía nadie más, así que como buena amiga te regalo un momento que quedará grabado por mucho tiempo, felicidades Cindy, disfruta tu momento eres la estrella". Sentenció.

Luego de unos días las autoridades encontraron el cadáver de Cindy Baquedano de 22 años a la orillas del río chamelecon en un gran estado de descomposición, había sido torturada y violada múltiples veces hasta morir, le faltaban los riñones y uno de sus ojos, la muerte de ella fue de gran impacto en vista que en la parte más profunda de la internet alguien, un usuario o quizás varios subieron un vídeo de una mujer siendo torturada hasta morir...

Y vos, sabes en realidad quienes son tus amigos? Piénsalo la bien la próxima vez que tú luz opaque la de los demás, nunca sabes si hay alguien en las sombras esperando a arrebatarte tú luz solamente porque no soporta verte brillar, quien sabe tal vez ya tengas un Alexander al que le estés contando más de lo que debas...

Se despide, SR. Tóxico.